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El aumento en solicitudes de hipotecas en USA genera optimismo en refinanciamientos

El reciente aumento en las solicitudes de hipotecas, con un incremento del 10.4%, ha generado optimismo en la industria de la vivienda en las primeras semanas de 2024. Este repunte se atribuye a las tasas hipotecarias más bajas en tres semanas, lo que ha impulsado la demanda de préstamos para viviendas y ha alimentado las conversaciones sobre una posible recuperación en refinanciamientos.

La encuesta semanal de solicitudes de hipotecas de la Asociación de Banqueros Hipotecarios (MBA, por sus siglas en inglés). Joel Kan, vicepresidente y economista jefe adjunto de la MBA, señaló que las tasas hipotecarias disminuyeron en todos los tipos de préstamos, con una reducción de seis puntos básicos en la tasa de interés fija a 30 años, situándose en el 6.75%, la más baja en tres semanas.

Kan destacó que tanto las solicitudes de compra como las de refinanciamiento aumentaron, impulsadas principalmente por el mercado convencional. Las solicitudes de compra aumentaron un 9%, mientras que las de refinanciamiento aumentaron un 11%. Los refinanciamientos representaron el 37.5% del total de solicitudes.

La distribución de los tipos de préstamos en el mercado mostró cambios, con una disminución en la participación de la Administración Federal de Vivienda (FHA, por sus siglas en inglés) y en la participación del Departamento de Asuntos de Veteranos de EE. UU. (V.A., por sus siglas en inglés). En contraste, la participación del Departamento de Agricultura de EE. UU. (USDA, por sus siglas en inglés) aumentó ligeramente.

A pesar de las tendencias positivas, Kan señaló que la actividad de compra aún se encuentra por debajo de los niveles del año pasado. Sin embargo, expresó un optimismo cauteloso de que, si las tasas continúan disminuyendo, las compras de viviendas podrían experimentar un aumento en los próximos meses.

Los analistas consideran la curva futura y las reducciones recientes en la tasa de interés de las hipotecas a 30 años como señales de vida para una posible recuperación en refinanciamientos. Pero no se espera un auge como el ocurrido durante los años de la COVID-19.

 

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