El auge de la construcción en Estados Unidos ha provocado notables transformaciones en el mercado inmobiliario, beneficiando especialmente a los inquilinos. Según Zillow Group, más de un tercio de los propietarios ofrecieron alguna forma de concesión de alquiler en julio de 2024. Estas concesiones, que incluyen descuentos, incentivos y otros beneficios para atraer nuevos inquilinos, han aumentado debido a la mayor disponibilidad de unidades habitacionales vacías. De hecho, en junio de 2024, se completaron más unidades multifamiliares que en cualquier otro mes de los últimos cincuenta años.
Las áreas del Sun Belt, como Florida y Texas, han experimentado caídas significativas en los precios de alquiler debido a la abundancia de nuevas construcciones. En Austin, Texas, el precio medio de alquiler solicitado descendió a USD 1,458 en julio, lo que representa una disminución del 16.9% respecto al año anterior, según Redfin. De manera similar, en Jacksonville, Florida, el precio medio bajó un 14.3% hasta situarse en USD 1,465 durante el mismo período.
Actualmente, el precio medio de alquiler en Texas es de USD 1,950, mientras que en Florida es de USD 2,500. Además, las concesiones de alquiler han aumentado en 45 de las 50 áreas metropolitanas más grandes de Estados Unidos. El incremento más destacado se dio en Jacksonville, Florida, con un aumento de 17 puntos porcentuales en las concesiones, seguido por Charlotte, Carolina del Norte (15.7 puntos), Raleigh, Carolina del Norte (14.7 puntos), Atlanta (14.5 puntos) y Austin, Texas (14.1 puntos).
Es relevante mencionar que los salarios están creciendo entre un 4% y un 5% anual, lo que implica que los alquileres están disminuyendo en comparación con los ingresos. Según datos de la Oficina de Estadísticas Laborales, los sueldos y salarios aumentaron un 5.1% en junio durante el periodo de doce meses que terminó en junio de 2024.
La tendencia creciente en la construcción de apartamentos también ha contribuido a la estabilización de los alquileres a nivel nacional. Sin embargo, aunque los precios de alquiler han caído, este descenso podría no ser permanente, ya que la desaceleración en la construcción podría llevar a un eventual aumento de precios en los próximos años. El auge de la construcción ha brindado un alivio a los inquilinos en Estados Unidos, con una mayor oferta de unidades y una estabilización o reducción de los precios en varias regiones. No obstante, el futuro del mercado dependerá en gran medida de cómo evolucionen tanto la oferta inmobiliaria como el mercado laboral.
