En el mundo de los negocios, pocas decisiones ofrecen tanta estabilidad y proyección como adquirir una franquicia en Estados Unidos. Sin embargo, uno de los temas que más dudas genera entre los potenciales inversores es el pago de regalías. ¿Vale realmente la pena comprometerse a pagar un porcentaje de sus ingresos a la empresa matriz? La respuesta es clara: sí, absolutamente sí.
Lejos de ser un simple costo adicional, las regalías representan una inversión estratégica que abre las puertas a un ecosistema empresarial diseñado para el éxito. Al invertir en una franquicia, no solo adquiere el derecho a operar bajo una marca reconocida, sino que también accede a una serie de ventajas competitivas difíciles de replicar por cuenta propia.
Acceso a una marca consolidada y modelo de negocio probado
El uso de una marca consolidada permite capitalizar una reputación ya construida, generando confianza inmediata en el consumidor y acelerando la entrada en el mercado. En paralelo, se obtiene un modelo de negocio probado, que reduce los riesgos propios de cualquier emprendimiento y elimina gran parte del proceso de ensayo y error.
Soporte constante del franquiciador
Las regalías también financian una estructura de soporte que hace toda la diferencia: capacitación permanente, manuales operativos, asistencia técnica, consultores de campo y más. Este respaldo constante le permite al franquiciado enfocarse en operar eficientemente, sin quedar a la deriva frente a los desafíos cotidianos.
Marketing de alcance nacional
Además, parte de esas regalías se destinan al marketing nacional e institucional, lo que multiplica el alcance de su negocio sin necesidad de gestionar grandes campañas locales. La marca se posiciona, crece y gana notoriedad con un esfuerzo conjunto y profesional.
Innovación y mejora continua
Un punto a menudo subestimado es el desarrollo continuo del sistema de franquicia: innovación tecnológica, mejoras operativas, y expansión de la red son prioridades para los franquiciadores serios, y todo eso es financiado en parte con las regalías que usted aporta. También hay beneficios prácticos, como el acceso a economías de escala mediante proveedores seleccionados, lo que impacta directamente en la rentabilidad.
Incluso desde una perspectiva migratoria, muchas franquicias reconocidas en EE. UU. facilitan el proceso de solicitud de la visa E-2 para inversionistas, al tratarse de modelos de negocio confiables, organizados y rentables, lo cual brinda un valor agregado muy importante para quienes buscan emigrar con un proyecto sólido.
Por estas razones pagar regalías no debe verse como una desventaja, sino como el precio de pertenecer a un sistema estructurado, respaldado y eficaz.
Es una forma de emprender con red de seguridad, minimizando errores y maximizando el potencial de éxito. Invertir en una franquicia en EE. UU., incluso pagando regalías, no solo es conveniente, es inteligente.
Marcelo Schamy es Presidente de M.S. Orbis Consulting, tiene más de 30 años de experiencia y gran reconocimiento en el mundo de los negocios en el Sur de la Florida. A lo largo de sus años como especialista en inversionistas principalmente extranjeros, participó en numerosos proyectos que lo convierten en un gran referente para inversionistas de toda Latinoamérica.
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